Los ciberataques hacia las empresas se han vuelto no solo más frecuentes, sino también más sofisticados. Las organizaciones, sin importar su tamaño o industria, se enfrentan diariamente a amenazas que pueden comprometer su información, afectar la continuidad operativa y dañar su reputación.
En este blog, te contamos cuáles son los ciberataques más habituales que afectan a las organizaciones y cómo prevenirlos.
Phishing con técnicas cada vez más sofisticadas
El phishing ha evolucionado significativamente y este año no será la excepción. Los atacantes utilizarán técnicas cada vez más sofisticadas, como el spear phishing, que se dirige específicamente a individuos de alto perfil dentro de las empresas. Además, se espera un aumento en el uso de deepfakes para engañar a los empleados y obtener acceso a información sensible.
Para protegerse, es crucial implementar medidas como programas de capacitación continua para los empleados, utilizar autenticación multifactor (MFA) y contar con soluciones avanzadas de filtrado de correo electrónico que puedan detectar y bloquear estos intentos antes de que lleguen a los destinatarios. Además, la automatización en ciberseguridad puede optimizar significativamente la detección de amenazas y mejorar la respuesta a incidentes en tiempo real.
Ransomware con doble chantaje
El ransomware representa el 35 % de todos los ataques y muestra un aumento anual del 84 %. Las nuevas variantes no solo cifran datos, sino que también amenazan con publicarlos si no se paga el rescate. Este doble chantaje aumenta la presión sobre las empresas para que paguen, a menudo con consecuencias financieras y reputacionales graves.
Las empresas deben invertir en soluciones de respaldo robustas y de encriptación de datos para mitigar el impacto de estos ataques. Además, es vital contar con un plan de respuesta a incidentes bien definido que incluya la colaboración con expertos en ciberseguridad y las autoridades pertinentes.
Ataques DDoS con botnets masivas
El número de ataques denegación de servicio distribuida (DDoS) subieron un 31 %, con una media diaria de 44 000 ataques en 2023, y seguirán siendo una amenaza significativa, con atacantes que utilizan botnets masivas para saturar los servicios en línea de las empresas. Estos ataques pueden causar interrupciones significativas y pérdidas financieras debido a la inactividad.
Para defenderse, las empresas deben implementar soluciones de mitigación DDoS que puedan detectar y desviar el tráfico malicioso antes de que afecte sus servicios. También es crucial contar con una infraestructura de red escalable y redundante que pueda manejar picos inesperados de tráfico.
Ataques de ingeniería social más personalizados y sofisticados
La ingeniería social sigue siendo una de las técnicas más efectivas para comprometer la seguridad empresarial. Este año, los ataques serán aún más personalizados y sofisticados, utilizando información obtenida de redes sociales y otras fuentes públicas para engañar a los empleados.
Para mitigar estos riesgos, las empresas deben fomentar una cultura de seguridad que incluya la concienciación y el entrenamiento regular de los empleados. Además, las políticas de seguridad deben ser claras y estrictas, limitando el acceso a información sensible solo a aquellos que realmente la necesiten.
El futuro de la ciberseguridad: La Ciberresiliencia
La ciberseguridad en 2025 dependerá en gran medida de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (ML) para detectar y responder a amenazas en tiempo real.
Además, la implementación de soluciones de ciberseguridad basadas en la nube permitirá a las empresas escalar sus defensas de manera más efectiva y responder rápidamente a nuevas amenazas.
Si bien la tecnología es esencial, alcanzar un nivel óptimo de ciberresiliencia exige combinarla con un enfoque estratégico que potencie la habilidad de las organizaciones para resistir y recuperarse de ataques o incidentes cibernéticos.
Cómo proteger tu empresa de estos ciberataques
En un escenario donde las amenazas evolucionan constantemente, no basta con reaccionar. Nuestra visión se centra en una ciberseguridad proactiva y resiliente. Por eso, desarrollamos nuestro servicio de M-SOC (Managed Security Operations Center), una solución integral que no solo protege contra los ciberataques más sofisticados del 2025, sino que también empodera a las organizaciones para anticiparse, adaptarse y recuperarse en un entorno digital en permanente cambio.